Asamblea por Firgas denuncia que el alcalde construye
castillos en el aire con los aparatos biosaludables.
Asamblea por Firgas ha emitido un comunicado en el que se
indica que en la rueda de prensa de la moción de censura, y
en numerosas ocasiones, Jaime Hernández afirmó
que la gestión de su grupo de gobierno giraría en
torno a tres compromisos directos con la ciudadanía:
participación ciudadana, creación de empleo y
emergencia social. Además, anunció que en su
corta legislatura trataría de culminar la ingente cantidad
de obras inacabadas o ruinosas del municipio. «Los ciudadanos
me juzgarán por los hechos, no por las palabras»,
declaró en una entrevista reciente.
Sin embargo, para Asamblea por Firgas, si de los hechos
dependiese su juicio, le vendría bien mejorar su ya afectada
verborrea, puesto que en cuanto a participación ciudadana,
como demuestran las casi 120 alegaciones que presentó
Asamblea a su «reglamento de participación
ciudadana», la escasa participación de los vecinos
y vecinas en la redacción del documento y la nula
información que estos y estas tenían (ni una sola
persona que nos entregó la alegación
conocía la existencia del reglamento con anterioridad)
demuestran que su defensa de la participación ciudadana es
una cuestión de postureo democrático.
Por otro lado según este colectivo, si bien es cierto que
las competencias del ayuntamiento en materia de empleo son escasas, el
proyecto «Firgas emprende» ha demostrado ser un
sonado fracaso, ya que parte de la base de que el problema en Firgas se
arregla fomentando el autoempleo, una visión ingenua que
ignora las características y necesidades de los desempleados
y las desempleadas del municipio (. Recordemos, además, que
Firgas fue el único municipio grancanario que no
aportó ni un solo euro al plan de creación de
empleo que fomentó el Gobierno de Canarias. Del vivero de
empresas ya nadie se acuerda y, mientras tanto, Firgas tiene un paro
que sigue rondando el 50 %.
Para Asamblea por Firgas, en cuanto a la emergencia social, el plan
Millenium, anunciado a bombo y platillo, probó ser poco
más que un parche de 10000 € con el que tres
empresarios y un alcalde se lavaron la cara, ya que no ha mejorado la
vida de los y las firguenses que no tienen para pagar alimento, luz y
agua, han perdido la vivienda (como denunciaba una representante de la
PAH en la I Asamblea abierta) o necesitan atención por su
condición de dependientes. Sin embargo, la concejala de
servicios sociales continúa percibiendo un sueldo mensual
por una labor que es claramente nefasta.
Por último, para Asamblea por firgas, si bien es cierto que
se ha reparado el muro del Estadio Domingo Ponce (150.000 €),
se ha inaugurado (al fin) el tanatorio (413.000 € de los
cuales se han destinado 60.000 € sólo para las
últimas obras), la casa de la juventud (22.000 €) y
se han asfaltado algunas calles, sorprende la cantidad de obras
ruinosas o inacabadas que aún se reparten por el municipio.
No obstante, les sorprende aún más que, con la
situación de emergencia social que vive el municipio, se
acometan nuevos proyectos como la defectuosa e innecesaria cancha de
pádel (60.000 €), el parque de la Fontana Rosa
(4.000 €), un embellecimiento innecesario en la parada de
guaguas de Lomo el Pino (52.000 €), las canchas y el kiosko en
el Colegio Viejo (160.000 €) la demolición la casa
de los maestros (28.000 €), la fachada del cine (109.000
€), las bicicletas de montaña (5.000 €) o
los flagrantes aparatos biosaludables que han colocado en El Risco
(10.000 €). Parece como si este grupo de gobierno desease que
ese casi 50 % de parados y paradas del municipio dedicase su tiempo
libre a ponerse en forma o usase las bicicletas para ir a entregar
currículos. En total, sin contar la inversión en
carreteras, el gasto en obras casi llega al millón de euros
(913.000 €), si añadimos los casi 280.000
€ de la plaza que han aprobado construir en Lomo el Pino,
finalmente sin parque infantil ni párking.
Para Asamblea por Firgas, el argumento recurrente para justificar estas
obras consiste en que son proyectos del Cabildo que no hay que
desperdiciar. Sin embargo, la poca efectividad o ausencia de medidas
del ayuntamiento en términos de empleo y emergencia social
prueba una preocupante ausencia de planificación y, sobre
todo, un descarado interés electoralista que usa los
recursos de todos para financiar la campaña de los dos
partidos en el poder. Y esto es un insulto en la cara de los y las
contribuyentes.
Para el colectivo, mientras un gran número de vecinos y
vecinas vive en condiciones deplorables, «este
alcalde», con el dinero de todos y todas, construye sus
castillos en el aire, con sus aparatos biosaludables, sus parques y sus
canchas de pádel, que no son más que humo de una
campaña electoral que ya ha empezado.
Por ello le preguntan al alcalde ¿qué hacemos
para atajar el desempleo y la emergencia social?. Y sentencian que
mientras hagan obras y pongan unos aparatos biosaludables, eso les
despistará.